Esta preciosidad que veis se llama LAIKA. Desde pequeña sabe bien lo que es dar todo a cambio de nada. Se crió en una casa en la que cayó en gracia mientras fue pequeña, pero no tanto cuando empezó a crecer.
Ahí donde la veis, sólo tiene 18 meses y es bajita para su raza; ya no crecerá más. Pero su familia, a la que se ve que ella quería con locura, prefirió abandonarla a su suerte en la perrera y hacerse con otro cachorro con el que lo más seguro se repetirá la historia...
El destino quiso ponerla en nuestro camino y nos permitió salvarla antes de que la sacrificaran.
Hoy por hoy está recuperando los kilos perdidos, las fuerzas y ganas de correr. Lo que tardará más tiempo en recuperar es la alegría, porque sus ojos y su expresión reflejan una honda tristeza. Y no exagero: mirad la foto de nuevo.
Tenemos que encontrarle entre todos un nuevo hogar. Una familia que esté a su altura. porque no sabéis cuánto bien os puede hacer un corazoncito así en vuestras vidas.
Os lo dice alguíen que ya comparte la suya con cuatro!.
De ahí mi título de hoy CORAZÓN ¿ANIMAL?... Pero, ¿quién es el animal?